La reaparición de Tiger Woods y de otros grandes deportistas tras su retirada
Por Daniel Riobóo Buezo Seguir a @danirioboo
Hay un dicho popular que reza que segundas partes nunca fueron buenas. Tiger Woods el el último gran deportista dispuesto a cuestionarlo al volver a la competición tras año y medio alejado de ella. El golfista, de 46 años, ha anunciado que disputará el Masters de Augusta entre el 7 y el 10 de abril. Woods, ganador de cinco chaquetas verdes, no juega un torneo desde que disputó el Masters en 2020, cuando la pandemia lo trasladó a noviembre. Posteriormente, en febrero de 2021, tuvo un grave accidente de tráfico que casi le posterga a una silla de ruedas ya que sufrió graves fracturas en ambas piernas que le dejaron cuatro meses sin poder andar. Pero el ganador de 15 majors se declara capaz de todo y quienes le han visto jugar los últimos días afirman que ha recuperado el swing que tenía y que en las largas distancias, uno de los hándicaps que presentó durante el invierno, ya es capaz de alcanzar la media del resto de competidores.
Las consecuencias del accidente obligan a Woods a adoptar nuevos hábitos antes y después de jugar. «Ahora el trabajo consiste en saber cómo responderá el cuerpo al día siguiente después de jugar. Sobre todo la pierna derecha y la espalda. Y es un esfuerzo extra porque ahora necesito un par de horas para calentar y para el trabajo posterior a jugar, para cosas cotidianas -estiramientos- que antes no me llevaban tanto tiempo. Sé que 72 hoyos son un gran desafío, pero estoy preparado para ello» ha declarado el golfista estadounidense. Su adaptación también necesita un cambio de zapatos. Ha tenido que dejar los Nike para ponerse unos Footjoy con una cámara de aire algo menos rígida. «Por la cantidad de tornillos, clavos y placas que tengo en la pierna, necesito más estabilidad. Mi movilidad es limitada y no tengo muy claro que mejore». La vuelta a la competición es un reto y casi un milagro para Woods. ¿Conseguirá regresar a su mejor forma y asombrar de nuevo al mundo? ¿Qué es lo que han hecho otros grandes campeones al regresar a la competición tras sus retiradas?
La reaparición de Michael Phelps en los Juegos de Río 2016
Michael Phelps fue uno de los últimos grandes deportistas que arriesgaron su prestigio volviendo a la competición tras haberse retirado en la cima de la natación. «El tiburón de Baltimore» decidió volver a la competición tras retirarse después de los Juegos Olímpicos de Londres de 2012 en los que se convirtió en el deportista olímpico más laureado de la historia con 22 medallas. Tras casi dos años alejado de las piscinas viviendo la ‘dolce vita’ de las estrellas retiradas, el sensacional nadador estadounidense reapareció en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016. Y lo hizo a lo grande consiguiendo cuatro nuevas medallas de oro: en los 200 metros mariposa, en los 200 m estilos y en los relevos 4 x 100 metros libres y 4 × 200 metros libres para retirarse definitivamente con el récord de 28 medallas olímpicas, 23 de ellas de oro.
Las decepcionantes reapariciones de Ian Thorpe y Michael Spitz y el éxito de Dara Torres
El caso de Phelps no es el único intento de regreso de un gran nadador. Su predecesor como rey de la natación mundial, el australiano Ian Thorpe (cinco oros olímpicos y nueve mundiales) intentó volver a la competición para participar en los Juegos de Londres tras haberse retirado con tan sólo 24 años en 2006. Su regreso a las piscinas no obtuvo los resultados esperados y, tras no conseguir clasificarse con su país para la cita olímpica, Thorpe sufrió una depresión y diversos problemas físicos que le hicieron retirarse definitivamente.
Más exótica y con fines puramente económicos fue la vuelta a la competición con 41 años del mítico nadador estadounidense Mark Spitz (siete oros olímpicos en Múnich 1972) que trató sin éxito de clasificarse para los Juegos de Barcelona al recibir una oferta del director de cine Bud Greenspan que quiso grabar su hazaña. Aunque casi mejoró sus marcas de veinteañero, Spitz se quedó a dos segundos de la marca exigida para clasificarse.
Quién si consiguió la hazaña de volver a su mejor nivel, también con 41 años y tras ser madre, fue la nadadora Dara Torres, que consiguió nada menos que tres medallas olímpicas en Beijing 2008 tras volver para competir en sus quintos juegos olímpicos. Una mujer de récord que actualmente comparte sus experiencias a través de charlas motivacionales y de un libro en el que asegura que la edad es sólo un número. Siguiendo su ejemplo, la en su momento niña prodigio de la natación estadounidense, Janet Evans (cuatro veces campeona olímpica y retirada a los 25 años), también decidió intentar disputar los JJOO de Londres a la misma edad que Dara Torres (41 años) aunque en este caso su intento no tuvo éxito y se quedó sin su pasaporte olímpico.
Pelé y su retorno al fútbol tras sus problemas económicos
Fiel al Santos durante toda su carrera deportiva y con tres mundiales en sus vitrinas, Edson Arantes do Nascimento, Pelé, se retiró del fútbol en 1974 con 34 años. Pero el astro brasileño no tardó demasiado en regresar a los estadios ya que, tras varias inversiones ruinosas y al borde de la bancarrota, fue tentado para volver a jugar por equipos como la Juventus, el AC Milán, el Real Madrid o el América de México. Finalmente «O Réi» decidió decantarse por el Cosmos de Nueva York de la entonces pujante liga norteamericana, una oferta exótica y sin duda menos exigente físicamente que otras ligas europeas o latinoamericanas. Pelé jugaría durante dos años más hasta que el 1 de octubre de 1977 a los 36 años se despidió definitivamente del fútbol ante 75.000 espectadores en un encuentro entre el Santos y el Cosmos jugando un tiempo con cada equipo.
Las dos reapariciones de Michael Jordan
Algunos grandes mitos del deporte quizá piensan tener la capacidad de poder volver a lo más alto en sus reapariciones y Michael Jordan, probablemente el mejor jugador de la historia del baloncesto y ganador de seis anillos de la NBA con los Chicago Bulls, en cierta medida lo consiguió en su primera vuelta a la competición. Retirado prematuramente a los 30 años tras el extraño fallecimiento de su padre, Jordan probó en el béisbol ya que así se lo había prometido a su progenitor. Sin demasiada suerte con el bate, regresó a la NBA para volver a liderar a Chicago Bulls en la conquista de otros tres anillos y retirarse a los 36 años. De nuevo incapaz de frenar su espíritu competitivo, Jordan volvió otra vez al parqué en 2001 a los 38 años con los Washington Wizards, el equipo del que era presidente operativo. En sus dos últimas temporadas llenó pabellones, logró una media de más de veinte puntos por partido y disputó un nuevo All Star aunque no consiguió clasificar a su equipo para los playoffs y abandonó definitivamente el baloncesto a los 40 años.
El regreso a las pistas de tenis de Monica Seles y Jennifer Capriati
Ganadora de nueve Grand Slams a lo largo de su carrera, la tenista serbia nacionalizada estadounidense Monica Seles también volvió a las pistas tras su primera retirada en 1993. Fue un abandono obligado tras ser apuñalada mientras descansaba en un partido por un fan alemán obsesionado con Steffi Graf que quería que su paisana recuperara el número uno mundial que le había arrebatado Seles, que tan sólo tenía 20 años. El ataque hizo que el tenis mejorara sus medidas de seguridad pero dejó en la jugadora serbia secuelas no sólo físicas sino especialmente psicológicas que forzaron su retirada de las pistas durante más de dos años. Seles no volvió a jugar nunca en Alemania pero sí regresó al circuito. Aunque nunca volvió a alcanzar el número uno de nuevo sí consiguió el Open de Australia de 1996 y ayudó a EEUU a conseguir dos títulos de la Copa Federación antes de poner fin definitivamente a su carrera en 2003 con apenas 30 años.
Distinto fue el caso de la jugadora norteamericana Jennifer Capriati. Talento precoz del tenis femenino, Capriati debutó en el circuito profesional con tan sólo 13 años situándose en el top ten mundial durante su adolescencia y siendo campeona olímpica con tan sólo 16 años en Barcelona 92. Un año después, tras varios resultados decepcionantes, abandonó temporalmente el circuito para centrarse en sus estudios universitarios y posteriormente tuvo problemas personales y legales al ser arrestada por posesión de marihuana. Tras un amago de retorno, volvió definitivamente a la competición en 1996 y poco a poco fue mejorando sus prestaciones hasta conseguir sus mejores resultados en 2001 cuando conquistó el Abierto de Australia y Roland Garros repitiendo en tierras australianas en 2002. Desde entonces comenzó un lento declive para retirarse definitivamente en 2004 tras diversos problemas físicos. En su caso, su segunda etapa fue mejor que la primera si bien había abandonado el tenis muy joven y aún le quedaban sus mejores años por delante.
La vuelta a la Fórmula 1 de Michael Schumacher y Fernando Alonso
Michael Schumacher ha sido otro de los grandes protagonistas de la vuelta al deporte de alta competición tras varios años retirado. Siete veces campeón del mundo de Fórmula 1, el káiser se cortó la coleta en 2006 a los 37 años pero no aguantó demasiado tiempo sin su afición a liberar adrenalina y pronto empezó a coquetear con su vuelta y hasta con competir en motociclismo. Finalmente, Schumacher regresó a la Fórmula 1 en 2010 en el equipo Mercedes-Benz pero nunca consiguió resultados a la altura de su leyenda y tan sólo obtuvo un tercer puesto como mejor resultado en el Gran Premio de Valencia de 2012 para retirarse al final de esa temporada siendo sustituido por Lewis Hamilton en la escudería alemana. Si bien las consecuencias de su grave accidente de esquí le hicieron retirarse obligatoriamente. Posteriormente, las consecuencias del grave accidente de esquí que sufrió en 2013 le dejaron en una situación física muy precaria.
Siguiendo lo que hizo Schumacher, el bicampeón del mundo de Fórmula 1 Fernando Alonso también volvió la temporada pasada al gran circo del automovilismo tras dos años en los que probó las pruebas de resistencia y se sumó a los aventureros del rally Dakar. Alonso lo ha hecho con Alpine F1 Team, parte de la familia Renault con la que ganó sus dos mundiales.
El regreso a las carreteras de Lance Armstrong
Desprestigiado tras ser desposeído de sus siete Tours y tras haber reconocido su dopaje durante gran parte de su carrera, Lance Armstrong ha sido uno de los deportistas más polémicos y que más ha dado que hablar en los últimos años. Ambicioso como pocos, el carácter ultra competitivo del ciclista texano hizo que, tras retirarse por todo lo alto del ciclismo en 2005, decidiera volver a la bicicleta en 2009 con 37 años asegurando que lo hacía para potenciar la lucha contra el cáncer, enfermedad que superó con éxito y causa de la que siempre ha sido abanderado. Y es que los maratones y el triatlón no colmaban su afán competidor. Su retorno dio mucho que hablar por su rivalidad con Alberto Contador, compañero de equipo en el Astaná y al que escoltó en el podio como tercer clasificado en el Tour de 2009 aunque muy lejos de su absoluto dominio antes de su primera retirada. En su segundo año tras el retorno, Armstrong creó un nuevo equipo, el Team RadioShack aunque tan sólo pudo ser 23º en la Grande Boucle y meses después anunció su retirada definitiva poco antes de cumplir los 40 años.
El inagotable espíritu competitivo, la nostalgia de la gloria y la fama, ofertas irrechazables, la reaparición como reto personal o los problemas económicos son algunos de los motivos por los que algunos grandes campeones han vuelto a competir tras haberse retirado, con resultados discretos generalmente. ¿Conseguirá Tiger Woods brillar de nuevo en los campos de golf? ¿Es acertada su decisión? Pronto lo sabremos.