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 Por Daniel Riobóo Buezo

Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero han ido surgiendo iniciativas solidarias para ayudar al pueblo ucraniano, bien sea mediante la donación económica, de comida o de ropa así como acogiendo a refugiados de la guerra. En España ya están residiendo más de cien mil ciudadanos ucranianos refugiados y el deporte, una vez más, también está demostrando estar a la altura, tanto a través de iniciativas individuales como colectivas, ante la tragedia que está sufriendo Ucrania.

Daniel Escanciano, el jugador de ajedrez que acoge a una familia ucraniana de ocho miembros

A finales de marzo, Daniel Escanciano, un ingeniero residente en Alcalá de Henares y jugador y profesor de ajedrez, recibió una llamada. Era un profesor de ajedrez al que había conocido en una competición y que le comentaba la situación desesperada de la familia Prochaieva, formada por los progenitores Olena y Vadym y por sus seis hijos: Ivan y Nina, de 13 y 15 años, y las cuatrillizas de 12 años Alina, Tina, Elizabeta y Olha que están consideradas entre las mejores jugadoras del mundo en su categoría. Los padres buscaban refugio en España, un país que conocen al haberlo visitado en algunos campeonatos de sus hijas. Ante la situación cada vez más grave de su localidad en Ucrania, habían decidido salir del país.

La familia Prochaieva durante el mundial infantil de ajedrez de 2019.

Daniel pensó como podía ayudarles y se le ocurrió ofrecerles residir en su casa familiar en Casasuertes, un pueblo leonés del Parque Nacional de Picos de Europa de donde provienen sus padres. Hasta hace poco la localidad sólo tenía dos habitantes. Con la llegada de la familia Prochaieva, ya son diez. La familia viajó en dos coches desde Kiev en una odisea de cuatro días y llegó el 2 de abril, alojándose unos días en Riaño mientras Daniel acondicionaba la casa familiar. “La casa no estaba en condiciones para que pudiese entrar gente a vivir, y menos con niños. No vive nadie allí desde hace mucho tiempo y hace mucho frío por las noches».

La familia Prochaieva llegó finalmente a León el 2 de abril.

Dos semanas después las cuatrillizas ya están escolarizadas en el colegio de Riaño y los dos hijos mayores en el instituto de Cistierna mientras Daniel sigue ayudándoles a realizar todos los trámites que necesitan: «Es un no parar desde la mañana la noche». El día 7 definitivamente se instalaron en la casa de Casasuertes donde se organizó esa tarde una bienvenida para la familia, a la que acudieron decenas de vecinos de varios pueblos de la zona para acogerles y mostrarles su apoyo. La llegada de la familia Prochaieva ha supuesto un verdadero acontecimiento para un pueblo prácticamente deshabitado de lo que conocemos como España vaciada y que cobra vida principalmente en verano.

Los vecinos de Casasuertes y de los pueblos de los alrededores se juntaron para dar la bienvenida a sus nuevos vecinos.

Las cuatrillizas ya han comenzado a practicar ajedrez a través del Club Gijón Ajedrez 64. Compiten en Asturias y viajan cada fin de semana desde Casasuertes para medirse con otros ajedrecistas. Por su parte, Olena y Vadym continúa en contacto con familiares y amigos que, a través de los grupos de Telegram, les muestran el horror cotidiano de la guerra en Ucrania. Daniel cree que la montaña leonesa puede llegar a enamorar a la familia: “Igual deciden quedarse aquí, una vez que estén asentados. Supongo que depende de lo que vean que les puede ofrecer el pueblo y la zona para su vida”. Para contribuir a su encomiable labor y poder ayudar al mantenimiento de la familia Prochaieva, es posible hacer donaciones a través de esta cuenta corriente: ES37 2100 0452 6913 0018 2591 con el concepto «Donación familia Prochaieva».

La solidaridad de los equipos de fútbol y baloncesto españoles con Ucrania y los refugiados

La iniciativa de Daniel es un ejemplo de iniciativa individual pero también estamos viendo cada día como los clubes se suman al apoyo. Aprovechando su enorme tirón popular y mediático, los clubes de fútbol español,  junto a algunos de sus equipos de baloncesto, se han volcado en numerosos proyectos para ayudar y acoger a refugiados ucranianos.

El Espanyol organizó y realizó un viaje a Radymno (Polonia), una ciudad fronteriza con Ucrania, con fines humanitarios. El autobús del equipo blanquiazul partió de Barcelona cargado de alimentos, medicamentos y productos esenciales para tratar de ayudar a los afectados en esta guerra desplazados en la localidad.

El Real Madrid, por su parte, ha donado un millón de euros en el marco de la campaña de la Fundación Real Madrid «Todos con Ucrania», para contribuir apaliar las necesidades de la población desplazada. Este dinero irá destinado a las principales ONG con las que trabaja su fundación, en este caso Cruz Roja y ACNUR así como el socio de las escuelas de la Fundación en Ucrania, Epicenter for children.

El Atlético de Madrid también se ha sumado a la ola de solidaridad del deporte español con las víctimas de la guerra en Ucrania fletando un autobús junto con la Comunidad de Madrid. El vehículo se trasladó hasta Varsovia cargado con ayuda humanitaria destinada a las familias que sufren las consecuencias de la guerra y también recogió a 30 refugiados para traerlos hasta Madrid.

El Atlético de Madrid fletó un autobús que también trajo refugiados desde Ucrania.

El FC Barcelona y su fundación también se ha unido a las organizaciones que están apoyando a los refugiados ucranianos que llegan a Cataluña organizando una iniciativa para recoger productos de primera necesidad para bebés y niños pequeños que lleguen con sus madres instalando carpas en el Camp Nou y el Palau Blaugrana durante los partidos que disputa como local. Todo lo recogido será entregado a Cruz Roja.

Por su parte, el Grupo Baskonia Alavés se ha solidarizado con todas las víctimas de la guerra cediendo el importe íntegro de lo  recaudado en taquilla en los partidos Deportivo Alavés-Granada CF y Bitci Baskonia-Río Breogán, un dinero que ha sido destinado a ‘Save the Children’ para ayudar a los refugiados ucranianos.

Asimismo, el Valencia, el Levante y el Huesca van a acoger a 29 futbolistas ucranianos que se integrarán en las estructuras de estos tres clubes españoles. Son todos jugadores muy jóvenes, con edades comprendidas entre los 12 y los 16 años.

Otro equipo español que se solidariza con los damnificados de esta guerra es el Real Oviedo. El conjunto asturiano tiene acogidas en sus instalaciones a tres familias ucranianas. Para ayudarles, el club ha puesto en marcha una iniciativa mediante la cual los aficionados pueden ceder a estas familias comida, ropa y calzado.

La carrera solidaria por Ucrania en todas las capitales de provincia de España (sábado 18 de junio)

Si te gusta correr, también puedes colaborar con Ucrania participando en una carrera solidaria. Coopera ONG, una organización con más de 20 años de cooperación en Ucrania con mujeres y niños huérfanos, ha convocado una carrera solidaria el próximo sábado 21 de mayo en apoyo al pueblo de Ucrania. La cita tendrá lugar en todas las capitales de provincia y en las localidades cuyos Ayuntamientos quieran sumarse y dará inicio a las 18.00h con recorridos de 15,10 y 5 km.

La inscripción y compra de dorsales tiene un coste de 10 euros para los adultos y de 5 euros para los menores. Con la recaudación se creará un fondo de ayuda para cooperar con diferentes iniciativas encaminadas a ayudar a los refugiados ucranianos en España. El resto de la información se puede encontrar en www.carreraporucrania.com

La carrera por Ucrania recaudará fondos para los refugiados ucranianos que lleguen a España.

Estas son solo algunas de las iniciativas puestas en marcha desde el deporte español para ayudar a los refugiados de guerra ucranianos. Si conoces más iniciativas te agradeceríamos que las compartas con nosotros para completar este artículo.

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